La reconstrucción mamaria es mucho más que un procedimiento estético. Su objetivo principal es recrear el aspecto natural de la mama, incluyendo la areola y el pezón, ofreciendo a las pacientes la oportunidad de recuperar su imagen y bienestar emocional.
Existen diferentes razones por las cuales se realiza esta reconstrucción, por ejemplo: tras una mastectomía o la resección de seno debido al cáncer de mama, un accidente, trauma, para corregir asimetrías mamarias, entre otros.
En México, el cáncer de mama representa la primera causa de mortalidad por tumores malignos en mujeres mayores de 25 años.
Beneficios más allá de lo estético
Para muchas mujeres que han luchado contra el cáncer de mama, la reconstrucción ofrece mucho más que una restauración física. Facilita una mayor estabilidad emocional, brindando una actitud más positiva en el día a día. Además, contribuye a mejorar la vida social, sexual y, sobre todo, la autoestima y la confianza personal.
Tipos de Reconstrucción Mamaria
Existen varios métodos para llevar a cabo una reconstrucción mamaria, podemos clasificarlos en dos tipos principales: con materiales aloplásticos (implantes) o con tejido autólogo (propio del paciente). En algunos casos, es posible combinar ambas técnicas para obtener mejores resultados.
- Reconstrucción con Implantes (Aloplásticos):
Esta técnica involucra el uso de implantes mamarios o expansores. La elección de implantes dependerá de las características de la piel, el tratamiento previo del paciente (como radioterapia o quimioterapia) y el resultado estético que se desea alcanzar. El uso de expansores es una opción cuando la piel no es suficiente para cubrir un implante de inmediato. Este dispositivo se va expandiendo gradualmente hasta alcanzar el volumen adecuado, momento en el que se retira para colocar el implante definitivo.
- Reconstrucción con Tejido Autólogo:
Este método utiliza tejidos del propio cuerpo, como piel y grasa del abdomen, espalda o muslos, para recrear la mama. Ofrece una apariencia y consistencia más natural. Además, la reconstrucción autóloga experimenta cambios fisiológicos similares a la mama opuesta, generando un resultado más duradero y sin los riesgos asociados al uso de implantes.
¿Cuándo es el mejor momento para la reconstrucción?
El momento ideal para realizar la reconstrucción mamaria, ya sea de manera inmediata o diferida y el tipo de reconstrucción, dependerá de varios factores que se discutirán en consulta de valoración.
Recordemos que cada caso es diferente, por lo que el enfoque debe adaptarse a las necesidades específicas de cada paciente, siempre con la finalidad de restaurar la confianza, seguridad y calidad de vida.